(¡LOS ESCALOFRIANTES INSECTOS!
¡Santo Cielo, lo estamos pasando excelente!
¡Agárrense fuerte, mis intrépidos camaradas bromistas! Apenas hemos mellado la caoba de nuestros jocosos cofres.
Si me permiten dirigir la incisiva mirada de sus graciosas gafas a la deslizante regencia de insectos de goma, parásitos plásticos, serpientes retorcidas, pestes flexibles, y cada orden y filo de escalofriantes insectos.
¡Por todo lo que es sagrado, ahora estamos cocinando con petróleo!
En próximas exhibiciones nos adentraremos en artefactos útiles para sus hazañas. ¿Están sus cañas y carretes de pescar listos? Qué tal un poco de cable de hierro; no debería eludirnos. Traigan a la vida a esos retorcidos bribones, y pongan los nervios de alguna solterona como el naufragio del Héspero.
¿Tienes alguna molesta tía que nunca parece tener problemas con arruinar tus tardes soleadas? Una larga valla llena de astillas - ¿una cubeta de jalbegue, quizás?
¡Caramba, le enseñarás!
¿Y qué hay de aquel caballero de color oscuro que descuidadamente cuelga su magra cerca de la zarzaparrilla? ¡Harás que ese apático octorón camine con energía!)
Pensaste en consultar el texto para determinar exactamente qué tan hilarante es el muñeco ahora.
Pero este texto es demasiado grande para leerlo de manera oportuna. Decides olvidarlo.